Investigadores han encontrado la última comida de un tiranosaurio perfectamente conservada dentro de la cavidad de su estómago. Según una nueva investigación, se trata de las patas traseras de dos crías de dinosaurio. Este descubrimiento es especialmente emocionante ya que es la primera vez que se descubre el contenido del estómago de un tiranosaurio. El tiranosaurio en cuestión, un joven Gorgosaurus libratus, habría pesado alrededor de 772 libras y habría alcanzado 13 pies de largo en el momento de su muerte. Los dos dinosaurios bebés pertenecían a la especie llamada Citipes elegans y tendrían menos de 1 año cuando el tiranosaurio los cazó. Este fósil es la primera evidencia contundente de un patrón dietético sospechado desde hace mucho tiempo entre los grandes dinosaurios depredadores. Los tiranosaurios jóvenes tenían dietas diferentes a las de los adultos completamente desarrollados. En esta etapa de la vida, los jóvenes cazaban presas pequeñas y veloces, probablemente debido a que sus cuerpos aún no estaban preparados para presas más grandes. Se cree que el apetito voraz de los tiranosaurios adolescentes y otros carnívoros explica la falta de dinosaurios pequeños y medianos en el registro fósil. Este descubrimiento proporciona una visión fascinante de la vida y el comportamiento de los tiranosaurios en su etapa de crecimiento y cómo llenaron un nicho en el ecosistema.