En los últimos cuatro años, Estados Unidos ha experimentado una serie de eventos económicos sin precedentes. Desde la pandemia de COVID-19 que hundió los mercados financieros hasta la espiral de inflación y tipos de interés al alza, y ahora los mercados bursátiles en máximos históricos. La Reserva Federal y el Gobierno estadounidense tomaron medidas rápidas para estabilizar la economía, pero los hogares se enfrentaron a un aumento de los precios y los pagos de deudas. A pesar de estos desafíos, la economía estadounidense ha mostrado un crecimiento sólido, con un bajo desempleo y una inflación controlada. El entusiasmo por la inteligencia artificial y las señales de recortes en los tipos de interés han impulsado el mercado. Sin embargo, aún no está claro por qué Estados Unidos ha prosperado mientras otros países enfrentan dificultades económicas. El aumento de los precios puede ser transitorio o resultado del crecimiento de la masa monetaria. Los desembolsos masivos del Gobierno pueden haber evitado una recesión. En resumen, aunque nadie puede predecir el futuro, comprender cómo hemos llegado hasta aquí nos ayuda a entender los riesgos potenciales que enfrenta la economía estadounidense en 2024.
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