Un buque mercante ha sido secuestrado por desconocidos frente a las costas de Somalia, avivando el temor a un resurgimiento de la piratería en el golfo de Adén y el mar Rojo. El buque Ruen, de bandera maltesa, fue inspeccionado por un buque de guerra español después de recibir informes de su secuestro. Aunque no se sabe quiénes son los secuestradores, se cree que podrían ser piratas somalíes. La falta de seguridad en la región y el caos causado por los ataques de los hutíes de Yemen podrían haber alentado su regreso. Las autoridades somalíes aseguran que han trabajado para combatir la piratería, pero el repunte reciente plantea dudas sobre la efectividad de sus esfuerzos. En respuesta a estos incidentes, diez países han formado una coalición internacional para garantizar la seguridad del tráfico marítimo en el mar Rojo. La Operación Guardián de la Prosperidad, liderada por la Fuerza de Tarea 153, tiene como objetivo garantizar la libertad de navegación y promover la seguridad y la prosperidad regional.
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