Un estudio de la Universidad de Sydney ha encontrado que realizar la mayor parte de la actividad física diaria por la noche está vinculado con mayores beneficios para la salud en personas con obesidad. Los investigadores siguieron a 30.000 personas durante casi 8 años y descubrieron que aquellos que realizaban la mayor parte de su actividad física aeróbica moderada a vigorosa entre las 6 p.m. y la medianoche tenían el riesgo más bajo de muerte prematura y muerte por enfermedad cardiovascular.
La frecuencia de la actividad física moderada a vigorosa por la noche parecía ser más importante que la cantidad total de actividad física diaria. El estudio sugiere que planificar la actividad física en ciertos momentos del día podría ayudar a mitigar los riesgos de enfermedades cardiovasculares y muerte prematura en personas con obesidad. Sin embargo, se necesitan más investigaciones para establecer vínculos causales.
El profesor Emmanuel Stamatakis, director del Centro de Investigación Mackenzie Wearables en la Universidad de Sydney, ha destacado la importancia de los datos de dispositivos portátiles en la investigación de patrones de actividad física para la salud. Los datos capturados por estos dispositivos permiten examinar los patrones de actividad física en una resolución muy alta y traducir los hallazgos en consejos que podrían desempeñar un papel importante en la atención médica.
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