Los mosquitos son los seres vivos que más muertes humanas causan cada año, transmitiendo patógenos que causan enfermedades. Menos del 6% de las 3,600 especies de mosquitos son vectores de enfermedades, pero estos representan una amenaza significativa para la salud pública. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha identificado 9 virus transmitidos por mosquitos que requieren mayor atención en América Latina y el Caribe, incluyendo el virus de la encefalomielitis equina que ha resurgido en Argentina y Uruguay. Además del dengue, Zika, fiebre amarilla y encefalitis de San Luis, otros virus como el Chikungunya, Mayaro y Oropouche también son transmitidos por mosquitos. Estos virus han causado brotes y epidemias en la región, con millones de casos y miles de muertes. Los factores que contribuyen a la propagación de estos virus incluyen cambios en la demografía humana, urbanización no planificada, insuficiencia en la provisión de agua potable, aumento en la producción de alimentos y uso de la tierra, viajes internacionales, cambio climático y alteraciones en el ecosistema. Para combatir esta amenaza, se están implementando diversas estrategias, como el uso de la bacteria Wolbachia para reducir la propagación del dengue, la producción de mosquitos modificados genéticamente y el desarrollo de vacunas. Sin embargo, es fundamental que se fortalezcan las capacidades de detección y vigilancia de laboratorio para una respuesta oportuna a los brotes y epidemias. Además, se requiere la participación activa de la comunidad en la eliminación de criaderos de mosquitos y el uso de medidas de protección personal, como repelentes y ropa adecuada. En resumen, los mosquitos representan una amenaza significativa para la salud pública debido a su capacidad de transmitir enfermedades, y es necesario tomar medidas para prevenir y controlar su propagación.
Foto | Infobae.com
Via | Infobae.com