El frío ya está aquí, y es importante saber cómo mantenernos calientes cuando salimos al exterior. La ciencia de la termorregulación nos ofrece tres claves para combatir el frío: vestirse con varias capas, taparnos la cabeza y mantenernos activos. Sin embargo, es fundamental prestar atención a nuestras manos y pies, ya que son las partes del cuerpo más expuestas al frío. Para mantener calientes las manos, es recomendable usar guantes que no se mojen y minimizar los espacios entre los guantes y la ropa. En el caso de los pies, es importante evitar ir descalzos y mantenerlos secos. Levantar los pies cuando estamos sentados y moverlos también ayuda a mantenerlos calientes. Estos trucos sencillos nos permiten protegernos del frío de manera efectiva y disfrutar del invierno sin pasar frío.