El triunfo de la inteligencia artificial está generando beneficios récord para empresas como Nvidia, tanto en el desarrollo de IA como en la distribución de hardware. Los empleados veteranos de Nvidia se han vuelto millonarios gracias al aumento del valor de las acciones de la empresa. Sin embargo, esto ha generado tensiones con los empleados más nuevos. A pesar de la situación de semijubilación de los veteranos, su riqueza ha llevado a una falta de motivación y rendimiento laboral. Nvidia no cuenta con programas de evaluación del rendimiento, lo que agrava el problema. Aunque la empresa se compromete a no realizar despidos desde 2008, los empleados más nuevos se ven sobrecargados de trabajo. El éxito de la IA ha llevado a un problema de falta de motivación y rendimiento en Nvidia.
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