El coche eléctrico deportivo enfrenta un reto significativo: convencer a los conductores más puristas. Aquellos que disfrutan de la conducción manual y las sensaciones tradicionales suelen mirar con recelo a los vehículos eléctricos. Sin embargo, los coches eléctricos actuales, con baterías de más de 60 kWh, son una opción viable para la mayoría de los conductores urbanos.
Para los amantes de la conducción deportiva, Hyundai ha lanzado el Ioniq 5 N, un coche eléctrico que simula un cambio de doble embrague con levas. Este modelo busca ofrecer una experiencia de conducción similar a la de un coche de combustión, con sonidos y sensaciones que imitan los cambios de marcha tradicionales.
El Ioniq 5 N incluye tres modos de sonido: gasolina, eléctrico y supersónico, todos generados artificialmente. Las primeras pruebas han sido positivas, destacando la credibilidad de los sonidos y la sensación de cambio de marchas. Este enfoque innovador podría marcar el futuro de los coches eléctricos deportivos, ofreciendo una alternativa atractiva para los puristas.
Imagen: Hyundai