El avión espacial X-37B del Pentágono se lanzará esta noche a bordo de un cohete Falcon Heavy de SpaceX. El X-37B es un avión espacial robótico de la Fuerza Aérea y la Fuerza Espacial de Estados Unidos, diseñado para propulsarse, reentrar en la atmósfera y aterrizar planeando. Tiene aproximadamente 9 metros de largo, pesa unas cinco toneladas y ha acumulado 3.774 días en el espacio en sus seis misiones anteriores. El X-37B ha sido utilizado principalmente para lanzar satélites y realizar experimentos y demostraciones de tecnología en órbita. Aunque gran parte de sus actividades son secretas, se especula que podría estar siendo utilizado para el espionaje y para impulsar satélites ya en el espacio. En su séptima misión, se espera que el X-37B alcance una órbita más alta que nunca antes. Aunque no se sabe exactamente qué hará en esta misión, se menciona que se realizarán pruebas en nuevos regímenes orbitales, tecnologías de detección de amenazas espaciales y los efectos de la radiación en materiales de la NASA. A lo largo de los años, han surgido especulaciones sobre el X-37B, incluyendo la posibilidad de lanzar armas desde el espacio, aunque el Pentágono lo ha negado. También se ha sugerido que se utiliza para espiar naves chinas. A pesar de las incógnitas, el X-37B continúa siendo una de las naves más enigmáticas del Ejército de Estados Unidos.