El VAR fue implementado en el fútbol con la intención de hacer el juego más justo mediante la revisión de jugadas polémicas y trazado de líneas de fuera de juego. Sin embargo, aunque ha ayudado a reducir errores arbitrales groseros, estos siguen ocurriendo, especialmente en la Premier League, que ha experimentado decisiones controvertidas casi en cada jornada.
La Premier League ha decidido, tras una petición del Wolverhampton, que los 20 equipos votarán el 20 de junio para decidir si continúan utilizando el VAR. Se necesitará el voto positivo de 14 equipos para mantener el VAR, de lo contrario, será abolido.
En medio de esta controversia, hubo dos acciones polémicas en partidos decisivos. En el encuentro entre el Manchester City y el Tottenham, un posible fuera de juego en un gol de Haaland no fue revisado adecuadamente por el VAR. Otro incidente ocurrió en el partido entre Manchester United y Newcastle, donde un penalti no concedido a favor de Newcastle generó controversia. Estas decisiones polémicas han intensificado el debate sobre la eficacia del VAR en la Premier League, que podría enfrentar su última temporada con esta herramienta si se decide su eliminación en la votación.