Ticketmaster ha confirmado una filtración masiva de datos que afectó a más de 560 millones de usuarios. El incidente, ocurrido el 20 de mayo, fue atribuido al grupo hacker ShinyHunters, que intentó vender los datos en la dark web. La información comprometida incluye nombres, direcciones, números de teléfono e información bancaria.
La compañía detectó actividad no autorizada en su base de datos y está colaborando con las autoridades para mitigar el riesgo. Aunque no se ha lanzado un comunicado oficial a los usuarios, se recomienda cambiar contraseñas y monitorizar la actividad bancaria.
El ataque se produjo en un momento complicado para Ticketmaster, ya que enfrenta una demanda del Departamento de Justicia de los Estados Unidos por monopolio ilegal en la venta de entradas para eventos en directo.
Imagen: Genbeta