La policía de Greenwich, Connecticut, ha logrado recuperar un Ferrari 812 GTS robado gracias a la inesperada colaboración de los AirPods de su dueño, olvidados en el vehículo. Este incidente ha permitido no solo la recuperación del superdeportivo, valorado en más de 500.000 euros, sino también el arresto de dos presuntos ladrones, quienes contaban con antecedentes por robos similares.
El 16 de septiembre, el Departamento de Policía de Waterbury recibió un aviso sobre el robo del Ferrari. El propietario había dejado sus AirPods en el coche, lo que facilitó el rastreo del vehículo mediante la función de seguridad «Find My». Gracias a esta tecnología, las autoridades localizaron el Ferrari en una gasolinera a 100 km del lugar del robo, sorprendiendo al ladrón en el acto.
El conductor, Dion Schontten, de 22 años, intentó huir al ser abordado por la policía, pero terminó estrellando el Ferrari contra un coche patrulla. Durante la fuga, dejó atrás su smartphone, que permitió a las autoridades identificarlo y también a su cómplice, Keon Webster, de 19 años. Ambos jóvenes ya tenían antecedentes por robos de coches de lujo.
Este caso resalta la importancia de la tecnología en la lucha contra el crimen. Los AirPods, que cuestan entre 150 y 200 euros, jugaron un papel crucial en la recuperación del vehículo. El jefe de Policía de Waterbury, Fernando Spagnolo, destacó el compromiso de las autoridades para garantizar que los delincuentes reincidentes enfrenten las consecuencias de sus actos.
A pesar de sus antecedentes, las fianzas de Schontten y Webster fueron reducidas, lo que ha generado cierta controversia. Schontten está detenido bajo una fianza de 150.000 dólares, mientras que Webster enfrenta una fianza de 300.000 dólares. Sin duda, este incidente pone de relieve cómo la tecnología puede ser un aliado en la lucha contra el crimen.
Imagen: Motorpasión