Puff Daddy, el magnate del hip-hop, se encuentra en la cárcel acusado de tráfico sexual y trata. Recientemente, se han sumado nuevas acusaciones de conducta sexual inapropiada. Una mujer lo demandó por violación y grabación de un vídeo con la intención de difundirlo. En una rueda de prensa, el abogado Tony Buzbee anunció que representa a 120 personas más, incluidos 25 menores, que planean emprender acciones legales contra el rapero.
Buzbee reveló que más de 3.000 personas han presentado acusaciones contra Sean ‘Diddy’ Combs. Además, instó a cualquier otra víctima a unirse a la causa. Según el abogado, muchos de los abusos supuestamente cometidos por Combs y su entorno siguen un patrón. “En el 90 por ciento de los casos, las víctimas estaban drogadas”, afirmó.
El abogado describió casos de violaciones repetidas de adolescentes, que habrían sido perpetradas por el rapero y sus asociados. Los abusos a menores, según Buzbee, ocurrían bajo la promesa de fama en la industria musical. Un caso destacado fue el de un niño de 9 años, llevado a Nueva York para una audición en Bad Boy Records, quien supuestamente fue abusado sexualmente por Combs y otros en el estudio.
Otro incidente involucró a una menor de 15 años, que fue drogada y llevada a una habitación privada, donde fue violada en presencia de Combs. El rapero enfrenta tres cargos criminales por abusos sexuales y coerción a mujeres para asistir a fiestas sexuales impulsadas por drogas. Puff Daddy se declaró inocente y permanece en prisión a la espera de juicio.
Las acusaciones contra el ganador del Grammy se han acumulado desde el año pasado, cuando la cantante Cassie, cuyo verdadero nombre es Casandra Ventura, alegó que Combs la sometió a más de una década de coerción física y drogas, además de una violación en 2018. Desde entonces, diversas demandas han retratado a Combs como un hombre violento que abusó de su estatus de celebridad para acosar a mujeres.
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