El Falcon 9 lanzó la misión PACE de la NASA, uno de los satélites más grandes y caros que estudiarán la contaminación de la Tierra. PACE se enfoca en el estudio del fitoplancton y los aerosoles, la vida microscópica del agua y el aire, que juega un papel importante en el ciclo de carbono y es sensible al cambio climático. Dotado de un radiómetro oceánico hiperespectral, PACE rastreará la distribución de fitoplancton y, por primera vez desde el espacio, identificará las comunidades de estos organismos a diario y a escala global. Además, el satélite llevará polarímetros para medir la calidad del aire y hacer un seguimiento de los aerosoles atmosféricos. Con un presupuesto de mil millones de dólares, PACE ha superado intentos de cancelación y es testimonio de la resistencia de la comunidad científica y su compromiso con la investigación climática.
Imagen: NASA, SpaceX