El faraónico proyecto de Arabia Saudita, Neom, y su rama más espectacular, The Line, están enfrentando múltiples reveses. A pesar de las impactantes ideas arquitectónicas, la falta de aprobaciones regulatorias ha retrasado un acuerdo de 10 mil millones de dólares con la empresa de transporte danesa DSV. Este retraso es solo uno de los muchos desafíos que enfrenta el desarrollo económico de Arabia Saudita bajo el paraguas de Saudi Vision 2030.
Según DSV, las aprobaciones regulatorias tanto de Arabia Saudita como de Egipto están tardando más de lo esperado. Además, los proyectos están siendo revisados y se espera una recalibración. Algunos proyectos avanzarán según lo planeado, pero otros podrían retrasarse o reducirse. Los desarrolladores ahora se centrarán en completar solo 2,7 km para 2030 como parte del primer módulo.
El coste de Neom, estimado en 500 mil millones de dólares, es un 50% más que el presupuesto federal del país para el año. Sin embargo, los analistas estiman que el coste total podría superar los 2 billones de dólares. La disminución de ingresos petroleros también está afectando al proyecto, obligando al gobierno saudí a reevaluar sus propuestas. El presupuesto gubernamental ha estado en déficit desde finales de 2022, y el Fondo de Inversión Pública (PIF) está sintiendo la presión.
Además de los problemas económicos, Neom se quedó sin planta desaladora en mayo y en abril se anunció un recorte a The Line, quedando en 2,7 km de largo. Las estimaciones de población para The Line también se han reducido debido a preocupaciones financieras. Estudios han cuestionado la viabilidad ecológica y la realidad de vivir en un enclave de estas características.
El tiempo dirá si este ambicioso proyecto se convierte en realidad, pero cada día parece más lejano.
Imagen: Neom
