En una entrevista televisiva, el narcotraficante uruguayo Sebastián Marset elogió a la Justicia y a la política de su país, afirmando que confía en el sistema judicial. Marset y su defensa buscan encontrar garantías en Uruguay para que sus familiares se entreguen en el país y no sean extraditados. Su abogado ha iniciado conversaciones con la Fiscalía para lograr esto. Además, se ha planteado la posibilidad de que Marset se entregue y asuma la responsabilidad de algunos delitos menores en Uruguay, lo que le permitiría dilatar su entrega en Paraguay. Uno de los delitos que Marset reconocería es la amenaza a una fiscal de Estupefacientes. Si se llega a un acuerdo, Marset podría ser imputado por un delito de violencia privada. Sin embargo, en la Fiscalía aseguran que el camino sería la extradición. Las autoridades uruguayas están enfocadas en capturarlo y no están dispuestas a negociar.