Microsoft ha anunciado que el Programa de Actualizaciones de Seguridad Extendidas (ESU) estará disponible para usuarios individuales, permitiéndoles pagar por actualizaciones de seguridad críticas y/o importantes después del final del ciclo de vida de Windows 10 en octubre de 2025. Esta opción es especialmente útil para empresas que necesitan mantener la compatibilidad con sus equipos y programas. Aunque los detalles sobre el servicio de suscripción y su duración aún no se conocen, esta medida demuestra la importancia de seguir actualizado para evitar riesgos de seguridad. Windows 11, con requisitos de hardware más exigentes, ha limitado la cantidad de equipos que pueden actualizarse, y Windows 10 sigue siendo el sistema operativo más utilizado con un 68% de cuota de mercado. El tiempo dirá si los usuarios están dispuestos a pagar por seguir utilizando Windows 10.