México ha ganado una apelación en la primera demanda interpuesta por un gobierno extranjero contra la industria armamentista estadounidense. En 2021, México demandó a fabricantes y distribuidores de armas estadounidenses por facilitar el tráfico de armas de estilo militar a los cárteles de la droga mexicanos. Un panel de tres jueces de la Corte de Apelaciones de Estados Unidos dictaminó que las empresas fabricantes de armas no están protegidas de responsabilidad. México argumentó que las prácticas comerciales de los fabricantes de armas facilitan el tráfico de armas. Según documentos judiciales, casi todas las armas recuperadas en la escena del crimen en México fueron traficadas desde Estados Unidos. La demanda se presentó contra varias empresas, incluyendo Smith & Wesson, Barrett Firearms y Glock. México busca una compensación de al menos US$ 10.000 millones. La Secretaría de Relaciones Exteriores de México ha instado a Estados Unidos a investigar el ingreso de armas destinadas al ejército estadounidense a México.
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