OpenAI ha cerrado una histórica ronda de financiación, sumando 500 millones de dólares de SoftBank, liderado por Masayoshi Son. Este acuerdo forma parte de una ronda total de 6.600 millones de dólares y marca un nuevo capítulo para la startup de Sam Altman. La inversión llega en un momento crítico, tras meses de incertidumbre en la empresa, que ha visto salidas de alto nivel.
Masayoshi Son, un visionario en tecnología, ha estado interesado en la inteligencia artificial (IA) desde hace años. En su reunión anual, afirmó que la IA es su principal misión. La inversión en OpenAI se alinea con su estrategia de diversificación en el sector de la IA, que incluye aplicaciones, infraestructura y hardware.
SoftBank ha estado invirtiendo en diversas capas de IA, y con OpenAI, se adentra en el desarrollo de modelos fundacionales. Esto es crucial, ya que estos modelos son la base de aplicaciones como ChatGPT. A pesar de los altibajos en el rendimiento de sus fondos de inversión, Son sigue apostando por la IA generativa.
Además, Son ha dado pasos significativos en el ámbito del hardware, destacando el éxito de Arm, un diseñador de chips clave en el espacio de la IA. Su ambición no se detiene ahí; está buscando crear una empresa de chips que compita con gigantes como Nvidia, y ha estado en conversaciones para construir nuevas instalaciones que respalden el avance de la IA.
La visión de Son es clara: quiere ser recordado como una de las piedras fundacionales de la inteligencia artificial general (AGI). Mientras OpenAI trabaja para acercar a la humanidad a la AGI, Son busca reunir todos los elementos necesarios para lograr este objetivo ambicioso.
Imagen: Business Insider
