Bobby y Marie McQueen, de Glasgow, viajaron hasta el sur de España para disfrutar de unas vacaciones en Magaluf, Mallorca. Sin embargo, su experiencia se vio empañada por el alto precio de las bebidas alcohólicas. Según el tabloide Daily Mirror, la pareja se quejó de tener que pagar 10 euros por un gin-tonic y 12 euros por un vino blanco grande. No son los únicos turistas británicos que se sienten así, ya que Veronica Horwood, una mujer de Bristol, también lamentó que las copas en los bares de Magaluf son ahora más caras y menos cargadas que antes.
El aumento de precios de las bebidas alcohólicas en los complejos turísticos de España ha generado el descontento de los turistas británicos. Según el periódico, los precios de los mojitos y los Sex on the beach pueden llegar a los 10 euros, mientras que una copa de Sauvignon Blanc puede costar hasta 12 euros. Además, algunos turistas han notado que las medidas de las bebidas son ahora menores.
El aumento de precios se debe en parte al incremento del coste de vida en España. Los empresarios también se ven afectados, ya que deben pagar cotizaciones a la Seguridad Social por sus empleados. A pesar de las quejas, Magaluf sigue siendo un destino turístico popular, aunque ha generado polémica en el pasado debido al consumo excesivo de alcohol.
Esta no es la primera vez que los turistas británicos se quejan de su experiencia en España. En abril, el Daily Mirror informó sobre las quejas de los turistas por las restricciones de agua en el sur de España debido a la sequía. A pesar de estos problemas, España sigue siendo un destino turístico muy popular para los británicos.
Imagen: Martijn Vonk (Unsplash)
