Un mes después de que los habitantes de Ciudad de México comenzaran a denunciar la contaminación del agua, el problema aún no ha sido resuelto. A pesar de las acusaciones de sabotaje, informes inconclusos y teorías varias, no hay una solución oficial al problema. Los ciudadanos exigen respuestas y pruebas de agua limpia, y el caso de Pearl Harbor sirve como un precedente importante. En Pearl Harbor, la Marina aseguró que el agua del grifo era segura, pero luego se descubrió que estaba contaminada con combustible para aviones. Esto resultó en graves problemas de salud y demandas legales. En Ciudad de México, los expertos han encontrado metales pesados y sustancias químicas en el agua, lo que respalda la teoría de la concentración de hidrocarburos en la red de suministro. Los vecinos han realizado análisis independientes y han encontrado sustancias como cloroformo y diclorobenceno en el agua. A pesar de esto, el gobierno ha afirmado que el agua es segura sin proporcionar pruebas o investigaciones oficiales. Los ciudadanos exigen una recomendación oficial de la Comisión de Derechos Humanos y más investigaciones para determinar el grado de contaminación y la naturaleza de los contaminantes.
Imagen: Pixabay, Guardianes del Agua BJ
