Los funcionarios de la Xunta de Galicia se han encontrado con una carga de trabajo extra: legalizar los corrales de gallinas. Hasta ahora se han registrado más de 40.000 corrales de autoconsumo en la comunidad. La medida busca tener un mayor control sanitario y evitar multas. Algunas tiendas de animales están ayudando a los dueños de corrales a realizar los trámites. La normativa establece que los corrales deben registrarse y no pueden comercializar sus productos. Las sanciones por no cumplir la ley van desde los 600 hasta los 3.000 euros. La iniciativa ha generado inquietud y ha afectado a las ventas de gallinas en la región.
Imagen: Nighthawk Shoots (Unsplash)