Las ventas de Tesla han caído por primera vez en cuatro años, y las empresas de alquiler son las principales afectadas. La bajada de precios de los coches de Tesla está afectando a la rentabilidad de estas compañías, que están dejando de comprar vehículos de la marca. Ante esta situación, Tesla ha ofrecido descuentos exclusivos para las empresas de alquiler, pero no está claro si serán suficientes.
Las empresas de alquiler comenzaron a ofrecer coches eléctricos porque se devaluaban menos y su mantenimiento era más económico. Sin embargo, la guerra de precios con las marcas chinas ha llevado a Tesla a rebajar sus coches, lo que perjudica a las alquiladoras. La bajada de precios significa que los coches se venden a un precio mucho menor en el mercado de segunda mano, lo que reduce la rentabilidad de las empresas.
Para evitar la pérdida de clientes, Tesla ha estado ofreciendo descuentos no oficiales a las empresas de alquiler en unidades en stock. Sin embargo, las pérdidas de las alquiladoras que han apostado por los coches eléctricos, en su mayoría Tesla, se cuentan por millones. Además, las marcas chinas están seduciendo a las empresas de alquiler no solo por el precio, sino también por el mejor servicio de reparación a menor coste.
Las reparaciones de los coches de Tesla son más caras y lentas, y la marca se niega a asumir el coste de defectos de fábrica. Esto ha llevado a algunas empresas a dejar de comprar coches de Tesla hasta que se solucionen estas deficiencias en las reparaciones. Las marcas chinas ofrecen coches más baratos y un mejor servicio de reparación, lo que asegura una mayor rentabilidad en la reventa.
Tesla debe cambiar su estrategia si no quiere perder el mercado de las empresas de alquiler y flotas de empresa. La competencia de las marcas chinas está siendo dura en todos los mercados, no solo en el de particulares. Es crucial que Tesla mejore su servicio de reparación y mantenga precios competitivos para mantener a sus clientes en el sector de alquiler.
Imagen: Motorpasión