El estándar USB se ha convertido en el indiscutible en nuestros dispositivos electrónicos, pero no siempre fue así. Windows 98 tuvo que adaptarse a esta tecnología, y para probar su compatibilidad se creó un ‘coche USB de la muerte’. Este carrito contaba con más de 60 dispositivos USB en cadena, y los ordenadores debían conectarse a él para comprobar si Windows 98 colapsaba. El objetivo era asustar a los desarrolladores y probar el sistema para futuros avances. Hoy en día, conectar un dispositivo USB es algo común y sencillo, pero en aquel entonces fue todo un reto para los ingenieros. Descubre la historia detrás del estándar USB y cómo se superaron los obstáculos en este artículo.