La Casa Blanca ha anunciado una serie de medidas para modernizar la infraestructura eléctrica de Estados Unidos, un paso crucial para la transformación hacia la energía limpia. La iniciativa, en colaboración con 21 estados, busca realizar reparaciones y mejoras rápidas en la red eléctrica, con el objetivo de reducir los cortes de energía y aumentar la capacidad de transmisión.
El anuncio coincide con cortes de energía en Texas debido a tormentas severas, subrayando la necesidad de una infraestructura más robusta. Según Climate Central, los cortes relacionados con el clima están en aumento, lo que ejerce presión sobre una red obsoleta.
El asesor climático de la Casa Blanca, Ali Zaidi, calificó la iniciativa como «sin precedentes» y destacó la inversión pública significativa para fortalecer la red y evitar cortes de energía. Estados Unidos enfrenta un problema de energía limpia, con más electricidad solar esperando ser conectada a la red que la cantidad actualmente en uso.
La demanda de electricidad se prevé que aumente debido al crecimiento de centros de datos, inteligencia artificial y vehículos eléctricos. La administración Biden proporcionará asistencia técnica y financiera a los estados para construir más líneas de transmisión. Estados como Pensilvania, Kentucky, Nueva York y Arizona se comprometen a modernizar su red eléctrica.
La Comisión Federal Reguladora de Energía (FERC) ha aprobado una nueva regulación para reformar la red eléctrica, obligando a las empresas a planificar proactivamente la construcción de transmisión regional. Esta medida es crucial para incorporar grandes cantidades de energía limpia a la red.
El presidente de la FERC, Willie Phillips, destacó la importancia de esta acción en un momento crítico, con la red siendo puesta a prueba por la creciente demanda y condiciones climáticas extremas.
Imagen: CNN
