ISIS se ha atribuido la responsabilidad de las mortíferas explosiones gemelas cerca del lugar de enterramiento del comandante militar asesinado Qasem Soleimani en el sur de Irán. Al menos 84 personas murieron y 284 resultaron heridas en las explosiones de este miércoles, en lo que fue el ataque más mortífero en Irán desde su revolución de 1979. ISIS emitió un comunicado afirmando que dos terroristas suicidas habían detonado sus chalecos explosivos durante el cuarto aniversario del asesinato de Soleimani. El presidente de Irán culpó a Israel por las explosiones y advirtió que pagaría un “alto precio”. El Ejército israelí no ha hecho comentarios al respecto. Analistas y un funcionario estadounidense especularon que la explosión tenía las características de un ataque terrorista.
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