Las redes sociales se han convertido en un terreno fértil para la difusión de noticias falsas. La desinformación es uno de los grandes problemas de estas plataformas, y detectarla no es tarea fácil. Ahora, un grupo de investigadores cree tener la mejor forma de hacerlo.
Investigadores del Instituto IMDEA Networks, en colaboración con la Universidad Tecnológica de Chipre y Lstech España SL, han creado un algoritmo que califican de «revolucionario» y que, según ellos, permite la detección de desinformación en redes sociales. Lo llaman HypergraphDis.
El Dr. Marius Paraschiv, investigador sénior de IMDEA Networks, explica cómo este sistema considera «las estructuras sociales complejas entre los usuarios, así como elementos relacionales y semánticos, para determinar la naturaleza de su contenido generado».
El Dr. Nikolaus Laoutaris, otro de los responsables de la investigación, destaca que uno de los problemas que afrontan estos sistemas es el crecimiento del volumen de datos en redes sociales. Para hacer que el algoritmo pudiese tener aplicación práctica, han logrado aumentar la precisión de detección y reducir «significativamente el tiempo de ejecución».
Los investigadores evaluaron cuatro conjuntos de datos de Twitter, aunque el algoritmo es adaptable a otras plataformas. Esos datos trataban tanto sobre las elecciones presidenciales en EEUU en 2016 como sobre la pandemia COVID-19. Según sus conclusiones, HypergraphDis superaba a los métodos existentes tanto en precisión como en eficiencia computacional.
Paraschiv añade que el contexto importa, y por ello es clave fijarse en las «relaciones y entorno de quienes difunden la información». Además, subraya, las fuentes no siempre son los principales generadores de un elemento de desinformación, «pueden ser simplemente propagadores o amplificadores».
El algoritmo se basa en las llamadas redes neuronales de hipergráfico, agrupamiento de gráficos para la detección de comunidades y procesamiento de lenguaje natural para la comprensión de textos. Los investigadores creen que GPT-4 podría ser interesante para ejecutar una detección de desinformación multimodal (texto, imágenes, vídeo). Aún así, admiten, hay «obstáculos importantes que superar, entre ellos los problemas de escala y la agregación de información procedente de múltiples fuentes».
Imagen: Xataka