El Impuesto de Sucesiones puede resultar complicado para aquellos no familiarizados con el derecho. En Castilla-La Mancha, existen leyes específicas que rigen este impuesto. Grava la transmisión de bienes y su cuantía varía entre el 7,65% y el 34%, dependiendo del valor heredado y la relación de parentesco. Además, se aplican bonificaciones en la cuota tributaria para descendientes, cónyuges y ascendientes, que van desde el 100% hasta el 80%. También hay exenciones para la vivienda habitual del difunto y reducciones para herederos con discapacidad o menores de 21 años. En el caso de heredar una empresa o negocio, se otorga una reducción del 4% sobre el valor neto, siempre y cuando cumpla ciertos requisitos.
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