El Parlamento Europeo ha aprobado una actualización de la normativa de pagos europea que obliga a que todas las transferencias bancarias se equiparen a lo que ofrece Bizum: movimientos de dinero gratuitos e instantáneos. Las transferencias deberán ser ejecutadas en menos de 10 segundos y el pagador deberá ser informado de su correcta recepción. La normativa también impone que el coste de estas transferencias no sea superior a las tradicionales y obliga a implementar medidas contra el fraude. Los bancos deberán contar con un sistema de verificación de identidad y podrán ofrecer a los clientes establecer un límite de dinero para las transferencias instantáneas. Los países tendrán un año para implementar la normativa en sus leyes nacionales.
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