Elon Musk ha manifestado su convicción de que la humanidad debe colonizar Marte y que toda la actividad humana puede abastecerse exclusivamente de energía solar. Recientemente, en su perfil de X, Musk afirmó que, al entender la escala Kardashev, se hace evidente que la generación de energía será esencialmente solar. Según sus cálculos, un área pequeña en Texas o Nuevo México podría suministrar toda la electricidad de Estados Unidos.
La escala Kardashev, propuesta en 1964, mide el desarrollo tecnológico de una civilización según la energía que puede utilizar. Actualmente, la humanidad no alcanza ni el primer nivel, que implica gestionar toda la energía de su planeta. Musk utiliza esta escala para resaltar el potencial del Sol, indicando que un área de 2,5 kilómetros cuadrados en la Tierra recibe 2,5 GW de energía solar.
A pesar de que la energía solar ha crecido un 73% el año pasado, alcanzando 3.870 GW en todo el mundo, los países líderes en instalación de paneles solares aún dependen de fuentes no renovables. Esto se debe a la intermitencia de la energía solar, que se ve afectada por condiciones climáticas. La red eléctrica necesita ser flexible y contar con almacenamiento adecuado para manejar estas fluctuaciones.
El almacenamiento de energía es un desafío, ya que las instalaciones de baterías no han crecido al mismo ritmo que los paneles solares. Aunque en algunos lugares como China se obliga a instalar baterías, su uso no es rentable debido a los bajos precios de la energía. Mientras tanto, la humanidad sigue en una etapa de transición, sin poder definirse como una civilización de Tipo I, capaz de aprovechar eficientemente toda la energía disponible en su planeta.
Imagen: Elon Musk, NASA