Elon Musk ha realizado numerosos cambios en X, la antigua Twitter, transformando la plataforma en un espacio centrado en el video y la viralidad. Antes, la red social priorizaba el contenido de calidad y la inmediatez, pero ahora se enfoca en las publicaciones de usuarios de pago. Este cambio ha generado preocupaciones sobre la calidad del contenido y su valor real.
Hasta ahora, los usuarios Premium y Premium+ ganaban dinero en función de la cantidad de anuncios en las respuestas de sus publicaciones. Sin embargo, X ha anunciado una nueva política: los pagos se basarán en la interacción de los usuarios Premium con el contenido, no en los anuncios. Esto significa que los creadores dependen de que sus seguidores sean Premium para obtener ingresos.
Este nuevo sistema ha llevado a que X se convierta en una especie de granja de interacciones, donde el contenido se valora en función de la cantidad de interacciones que genera. Los creadores ahora se ven obligados a atraer a usuarios Premium para monetizar su contenido, lo que puede llevar a una mayor producción de contenido polémico y viral.
Además, la falta de transparencia sobre cuántos usuarios son Premium genera incertidumbre. Aunque X afirma que su base de usuarios activos ha crecido, no se sabe cuántos de ellos son realmente Premium. Esto plantea preguntas sobre la sostenibilidad del nuevo modelo de negocio y su impacto en la calidad del contenido en la plataforma.
En resumen, los cambios implementados por Musk han transformado X en un entorno donde la viralidad y las interacciones son más importantes que la calidad del contenido. Este enfoque podría tener consecuencias a largo plazo para la plataforma y sus usuarios.
Imagen: Xataka