El telescopio espacial James Webb ha descubierto la galaxia JADES-GS-z7-01-QU, que murió cuando el universo tenía apenas 700 millones de años. Este hallazgo desafía nuestra comprensión actual de la evolución del cosmos y plantea nuevas preguntas sobre las galaxias ‘muertas’. Los astrónomos sugieren que la galaxia experimentó una intensa fase de formación de estrellas antes de apagarse repentinamente. Dos hipótesis se plantean para explicar su muerte prematura: la expulsión de gas por parte de un agujero negro supermasivo o el agotamiento de combustible. Este descubrimiento nos hace cuestionar si las galaxias ‘muertas’ podrían haber tenido múltiples vidas en el pasado. A medida que avancemos en nuestra exploración del cosmos con telescopios más potentes, es posible que nuestra comprensión de la formación y evolución de las galaxias en el universo temprano cambie.
Imagen: NASA, ESA, CSA