El presidente de la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV), Carlos Garrido, ha expresado su preocupación por el nuevo registro de viajeros, que considera un «auténtico despropósito». Durante su intervención en el Congreso de los Diputados, Garrido destacó que esta legislación se ha implementado sin un adecuado conocimiento del funcionamiento del sector turístico. Aseguró que la medida pone a las agencias de viajes en una situación comprometida, ya que no se aplica en otros países.
Ramón Estalella, secretario general de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), coincidió en que la legislación es absurda y fue creada por personas que no comprenden la industria. El nuevo registro, que se ha prorrogado hasta el 2 de diciembre, obligará a las empresas del sector a proporcionar 28 nuevos datos de sus clientes, sumando un total de 42, en un esfuerzo por la lucha antiterrorista.
A pesar de la reciente reunión entre el Ministerio del Interior y el sector, donde se acordó no exigir datos adicionales, Garrido considera que los datos solicitados siguen siendo excesivos y, en algunos casos, ilegales. Las agencias de viajes piden ser excluidas de esta obligación y, si se ven obligadas a participar, solicitan una regulación que ofrezca seguridad jurídica.
Garrido ejemplificó la dificultad de cumplir con esta normativa, mencionando el caso de una agencia en Don Benito y la complejidad de gestionar datos de congresos médicos con miles de asistentes. Además, enfatizó que esta legislación crea una desventaja competitiva para el sector español frente a otros países que no imponen requisitos similares.
Imagen: Business Insider