El primer coche eléctrico ruso que ha captado la atención en redes sociales resulta ser un prototipo de cuadriciclo pesado eléctrico desarrollado por la Universidad Politécnica de Moscú. Aunque ha generado gran interés, no es el primer coche eléctrico ruso ni se producirá en masa. Además, su diseño ha sido objeto de críticas por su apariencia poco atractiva. Rusia ha buscado mantener su industria automotriz en medio del conflicto con Ucrania, incluso empleando a presos en fábricas por falta de mano de obra. China ha sido uno de los principales beneficiarios de esta situación. A pesar de esto, Lada ya ha comenzado la producción de un SUV eléctrico con una autonomía de 400 km. La colaboración entre Rusia y China ha sido clave en el desarrollo de proyectos de vehículos eléctricos en Rusia. Aunque el prototipo ruso ha generado expectativas, no cumple con las características de un coche eléctrico en términos de homologación y diseño.