El precio del oro se prevé que continúe su rally de récords, alcanzando nuevos máximos a principios de 2025, según un informe de Goldman Sachs. Este análisis destaca que, además de las crecientes tensiones geopolíticas, que favorecen los activos refugio como el oro, hay otras dos razones clave que impulsarán su precio.
En primer lugar, la caída de los tipos de interés jugará un papel crucial. En segundo lugar, la demanda insaciable por parte de los bancos centrales de economías emergentes también contribuirá a este aumento. Goldman Sachs ha elevado su precio objetivo para el oro de 2.700 a 2.900 dólares por onza, lo que representa un incremento del 9% desde los niveles actuales.
Este aumento se producirá tras un repunte del 29% en el precio del oro en lo que va de año. Lina Thomas, de Goldman Sachs, explica que la recomendación sobre el oro se basa en tres factores: el impulso gradual desde los bajos tipos de interés globales, la alta demanda estructural de los bancos centrales y las ventajas del oro como cobertura frente a riesgos geopolíticos y financieros.
Goldman Sachs subraya que los bancos centrales de países emergentes, como China, son responsables del avance estructural de los precios del oro desde 2022. Se estima que la demanda institucional en el mercado OTC de Londres ha sido fuerte, con compras a un ritmo medio anualizado de 730 toneladas, lo que representa aproximadamente el 15% de la producción anual estimada.
Las compras de los bancos centrales en el mercado OTC de Londres impulsan alrededor de dos tercios de la subida prevista del precio del oro hasta los 2.900 dólares por onza a principios de 2025. Además, los inversores deben tener en cuenta los numerosos riesgos actuales en los mercados, como las elecciones presidenciales de Estados Unidos y la incertidumbre económica en la Costa Este debido a la huelga de estibadores.
Imagen: Business Insider