La Guardia Civil ha precintado 45.000 litros de aceite de oliva en una almazara de Ciudad Real que iban a ser vendidos sin cumplir las mínimas condiciones sanitarias. Además, se ha descubierto documentación que acredita la compra fraudulenta de 574.908 kilos de aceitunas y facturas de venta de aceite por más de 850.000 euros.
Este problema no solo provoca pérdidas millonarias, sino que ha escalado a niveles alarmantes. En Córdoba, se han talado 30 olivos para robar 70 kilos de aceitunas. En marzo, la delegación del Gobierno en Andalucía cifraba los robos de aceitunas en 523.568 kilos, una cifra que se ha quedado corta. Con el precio de la aceituna disparado, los robos se han generalizado en casi todas las provincias españolas.
Según datos del Ministerio del Interior y la Unión de Uniones, los robos en el campo han aumentado un 3,5% en 2023 respecto al año anterior, con una media de 31 robos al día. Las redes de tráfico ilegal de aceite han crecido y se han propagado por territorios cada vez más despoblados. En la sierra de Córdoba, una finca ha denunciado la tala de 30 olivos cargados de aceitunas, un hecho que ha generado gran intranquilidad en la comarca.
Imagen: Sven Brandsma/Vincent Eisfeld