En España, la inminente jubilación de la generación del ‘baby boom’ plantea un desafío significativo para las arcas públicas y la plantilla laboral. Este fenómeno afectará especialmente a las Administraciones Públicas, donde el 60% de los funcionarios se jubilará en los próximos diez años. Ante esta situación, el Gobierno ha propuesto una solución innovadora: la inteligencia artificial (IA).
El ministro José Luis Escrivá ha destacado la necesidad de reforzar la plantilla pública, especialmente en áreas como la Seguridad Social, Hacienda y la sanidad pública. La IA se presenta como una herramienta clave para suplir las vacantes y mejorar la eficiencia de los funcionarios en sus tareas diarias. Aunque la implementación exacta aún no está clara, la idea es que la IA complemente y optimice el trabajo humano.
Un ejemplo de esta estrategia ya se puede observar en la Agencia Tributaria, donde la IA se utiliza para analizar y cruzar datos, ayudando a prevenir el fraude fiscal. Este modelo ha sido exitoso y podría ser replicado en otros sectores de la administración pública.
En resumen, la inteligencia artificial se perfila como una solución viable para enfrentar el reto de las jubilaciones masivas en España, asegurando la continuidad y eficiencia de los servicios públicos.
Imagen: Radowan Nakif Rehan