El Gobierno de España ha aprobado el Séptimo Plan General de Residuos Radiactivos (PGRR), que aborda la gestión de los residuos radiactivos y el combustible gastado de las centrales nucleares españolas. El plan contempla el cierre escalonado de las centrales nucleares en operación entre 2027 y 2035, una vez que hayan transcurrido 40 años de vida útil. Además, se establece la construcción de un Almacén Geológico Profundo (AGP) para el almacenamiento definitivo de los residuos radiactivos y el combustible gastado. El plan también deja sin efecto la decisión de ubicar el almacén temporal centralizado (ATC) en Villar de Cañas, y propone la ampliación de los almacenes temporales individualizados (ATI) y la creación de almacenes temporales descentralizados (ATD) dentro de las plantas nucleares. El coste total de todas estas operaciones se estima en 20.220 millones de euros, que serán financiados por las empresas propietarias de las instalaciones nucleares a través de Enresa.
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