El áspero enfrentamiento entre la primera ministra Giorgia Meloni y la familia Agnelli ha puesto de manifiesto el empobrecimiento industrial de Italia y la complicada relación entre la política y la empresa. La bronca se originó por la venta de Fiat a los franceses, lo que ha llevado a una disminución en la producción de automóviles en Italia. La familia Agnelli, encabezada por John Elkann, presidente de Stellantis y Ferrari, ha sido criticada por privar al país de una de sus empresas más simbólicas. La disputa ha generado un debate sobre la independencia de la prensa, ya que el periódico ‘La Repubblica’, propiedad de la familia Agnelli, ha sido acusado de tener conflictos de intereses. Esta batalla refleja la obsesión de los grandes empresarios italianos por fundar dinastías y traspasar el poder a sus hijos. La historia de la familia Agnelli ha estado marcada por alegrías, dolores y traiciones, así como por disputas por la herencia millonaria. A pesar de las luchas legales, el imperio Agnelli sigue siendo poderoso, con Exor como su caja fuerte. John Elkann, a diferencia de su hermano Lapo, lleva una vida reservada y discreta. Esta disputa entre Meloni y los Agnelli es solo una muestra de cómo funciona el poder en Italia, donde el fútbol y la política están estrechamente entrelazados.
Imagen: CORDON PRESS