El avión solía ser un medio de transporte fascinante, pero ahora se ha convertido en algo común y lleno de inconvenientes. Los pasajeros están hartos de las prácticas de las compañías aéreas, como los retrasos, cancelaciones y pérdida de equipaje. Incluso en Estados Unidos, la percepción negativa sobre los vuelos supera a la positiva. La falta de trabajadores en la industria aérea, incluyendo pilotos, ha provocado problemas y molestias para los viajeros. Además, las huelgas de los trabajadores de tierra, personal de cabina y pilotos han sido frecuentes en España. El desencanto con volar es evidente, y el avión ya no es visto como una experiencia atractiva.
Imagen: Carlos Coronado