Hace unos años, programas como ‘Factor X’ y ‘MasterChef’ dominaban las audiencias televisivas. Sin embargo, la sobreexplotación y las polémicas, junto con la competencia de plataformas de streaming, han reducido su popularidad. La última edición de ‘Factor X’ apenas alcanzó un 5,5% de cuota de pantalla, con 399.000 espectadores, muy lejos del 15,1% de su primera temporada en 2007. Por otro lado, ‘MasterChef’ también muestra signos de agotamiento. Aunque sigue siendo uno de los programas más vistos de La 1, su última final solo logró un 5,1% de cuota y 1.033.000 espectadores, la cifra más baja de su historia.
En contraste, programas como ‘Supervivientes’ y ‘La Voz Kids’ siguen teniendo éxito. ‘Supervivientes’ mantiene un promedio de cuota del 19% en su edición actual, mientras que ‘La Voz Kids’ lidera las noches de los sábados con cuotas alrededor del 14%. Sin embargo, estos casos son excepcionales. ‘Gran Hermano VIP’ tuvo en 2023 las peores audiencias de su historia, con un promedio del 12,9%, lo que ha llevado a Telecinco a reformar el formato.
El auge del streaming también ha influido en la caída de los reality shows tradicionales. Plataformas como Netflix y Prime Video han apostado por nuevos formatos de telerrealidad, adaptados a los gustos actuales. ‘Operación Triunfo’ en Prime Video es un ejemplo de éxito, combinando tradición y modernidad para atraer a un público joven y activo en redes sociales. Este cambio en el statu quo sugiere que la telerrealidad puede evolucionar y seguir siendo relevante, siempre y cuando se adapte a las nuevas demandas del público.
Imagen: TVE