El pasado 3 de agosto, durante la serie de clasificación de salto de pértiga en los Juegos Olímpicos de París, el atleta francés Anthony Ammirati protagonizó un insólito incidente que ha captado la atención mundial. En su último intento, Ammirati no logró superar los 5,70 metros de altura, pero lo que realmente sorprendió fue cómo derribó el listón. El atleta tocó el listón con su pierna y, sorprendentemente, con su pene, lo que generó una ola de reacciones en redes sociales.
Las imágenes del momento se volvieron virales, convirtiéndose en uno de los momentos más comentados de los Juegos Olímpicos. Tras varios días de difusión internacional, un productor pornográfico, Daryn Parker, presidente de CamSoda, decidió hacerle una oferta a Ammirati. Parker le propuso una suma de hasta 250.000 dólares (230.000 euros) a cambio de una emisión en vivo de webcam de 60 minutos, donde el atleta podría mostrar sus atributos.
En una reciente recepción con miembros de la Federación Francesa de Atletismo, Ammirati expresó su sorpresa por la repercusión del incidente, que él mismo considera un simple «error por falta de ajuste correcto en el salto». Este curioso episodio ha puesto de relieve cómo un momento inesperado puede captar la atención del público y generar oportunidades inusuales.
Imagen: reuters
