Un estudio realizado por el centro de pensamiento en políticas públicas de Esade revela que el aumento de los pagos electrónicos ha llevado a un incremento significativo en la recaudación de impuestos en España. Según el estudio, el repliegue de los pagos en efectivo y la generalización del pago con tarjeta han situado bajo el radar de Hacienda más de 40.000 millones de euros de gastos de los hogares que antes no existían a efectos fiscales. Esto ha impulsado la recaudación por impuestos, especialmente el IVA, explicando alrededor de la mitad de los ingresos adicionales obtenidos en los años récord de 2022 y 2023. El estudio también señala que la reducción de la economía sumergida ha contribuido a este aumento de la recaudación, ya que los pagos electrónicos dejan un rastro y reducen el uso de efectivo. En total, el gasto en consumo de los hogares sujeto al IVA se ha incrementado en 70.924 millones de euros desde 2019, de los cuales solo 29.782 millones se explican por el incremento nominal del consumo debido a la inflación. El resto, unos 41.142 millones de euros, se atribuyen a un mayor volumen de consumo sometido a gravamen y a una mejora del cumplimiento tributario de los consumidores. En resumen, el aumento de los pagos electrónicos ha tenido un impacto significativo en la recaudación de impuestos en España, permitiendo al Estado obtener ingresos adicionales y reducir la economía sumergida.
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