La masificación turística en Baleares ha captado la atención de figuras influyentes como el actor Michael Douglas, quien ha expresado su preocupación por el turismo en la isla. Douglas, que compró una mansión en Mallorca en los años 90, no es ajeno al atractivo que la isla tiene para los compradores estadounidenses. Según datos recientes, cerca del 12% de los compradores de viviendas de lujo en Mallorca en 2023 fueron estadounidenses, lo que indica una tendencia creciente en este perfil de comprador.
El interés de los estadounidenses en el mercado inmobiliario de lujo de Mallorca ha ido en aumento. En 2022, casi el 50% de los clientes de algunas inmobiliarias eran de Estados Unidos. Este cambio ha llevado a que las inmobiliarias americanas, como Nest Seekers y Berkshire Hathaway, comiencen a establecerse en la isla para atender a este nuevo mercado. La demanda de propiedades de lujo ha crecido, y los precios también han aumentado significativamente, alcanzando un 9,5% de incremento en el precio del metro cuadrado en Palma de Mallorca en el último año.
Los precios de las propiedades en zonas exclusivas como Son Vida y Portixol-Molinar han alcanzado cifras exorbitantes, lo que ha hecho que el mercado inmobiliario se vuelva cada vez más inaccesible para la población local. En 2023, el coste medio de las propiedades vendidas por Engel & Völkers Mallorca fue de 1,88 millones de euros, con algunas villas alcanzando precios superiores a 60 millones de euros.
El atractivo de Mallorca para los compradores estadounidenses se debe a varios factores, como su clima, la población extranjera y la conexión directa entre Palma y el aeropuerto de Newark, que ha facilitado la inversión en propiedades. Este fenómeno ha transformado el mercado inmobiliario de la isla, convirtiéndola en un destino cada vez más deseado por los compradores de lujo.
Imagen: Farid Askerov (Unsplash)
