El líder del grupo de ransomware LockBit, Dmitry Khoroshev, ha sido identificado como el responsable de las actividades del grupo. Aunque aún no ha sido detenido, las autoridades internacionales están tras su pista y ofrecen una recompensa de 10 millones de dólares por cualquier información que conduzca a su captura.
LockBit ha sido responsable de numerosos ataques desde 2019, afectando a organizaciones de todo tipo, incluyendo ayuntamientos en España. Según las estadísticas, el grupo ha atacado a más de 2.000 víctimas y ha obtenido más de 100 millones de dólares en rescates.
La operación internacional «Cronos» llevada a cabo por Europol y Eurojust ha logrado reducir la capacidad de LockBit y sus ataques en un 73% en el Reino Unido desde febrero. Sin embargo, se cree que otro ciberdelincuente podría ocupar su lugar en el futuro.
La identificación de Khoroshev ha sido un gran avance en la lucha contra el ransomware, pero aún queda capturarlo. Su nombre completo, imagen y detalles de contacto son conocidos, lo que ha llevado a las autoridades a ofrecer una recompensa millonaria por su arresto.
La actividad de LockBit ha causado pérdidas económicas significativas, estimadas en miles de millones de dólares. Además, el grupo ha atacado a hospitales y empresas de salud, poniendo en peligro la vida de las personas.
A pesar de los esfuerzos de LockBit por reagruparse, su capacidad e impacto global se han visto reducidos. La identificación de Khoroshev ha debilitado al grupo y ha llevado a una disminución en sus ataques.
En resumen, Dmitry Khoroshev, líder de LockBit, ha sido identificado como el responsable de las actividades del grupo de ransomware más peligroso del mundo. Aunque aún no ha sido detenido, las autoridades internacionales están tras su pista y ofrecen una recompensa de 10 millones de dólares por su captura. LockBit ha causado pérdidas económicas significativas y ha atacado a hospitales y empresas de salud. Aunque el grupo ha intentado reagruparse, su capacidad e impacto global se han visto reducidos desde la operación internacional «Cronos».
Imagen: Xataka