Divorcio express en España: Procedimiento, costos y ventajas






Divorcio Express en España: Procedimiento y Costos

Divorcio Express en España: Procedimiento y Costos

En 1981, la aprobación de la Ley del Divorcio en España marcó un hito significativo. Desde entonces, el número de divorcios ha aumentado, alcanzando 92.344 en 2023, con una tasa de 192,1 por cada 100.000 habitantes.

¿Qué es el Divorcio Express?

Desde 2005, el divorcio express permite a las parejas disolver su matrimonio de manera rápida y sencilla. Este procedimiento es más eficiente y menos costoso que los métodos tradicionales.

Requisitos y Procedimiento

El divorcio express puede solicitarse tras tres meses de matrimonio, siempre que ambos cónyuges estén de acuerdo. El proceso puede resolverse en dos a tres meses, a diferencia del divorcio contencioso, que puede durar un año o más.

Para iniciar el proceso, es necesario un convenio regulador que detalle aspectos como la custodia de los hijos, régimen de visitas y pensión de alimentos. Este documento debe ser elaborado con la ayuda de abogados y procuradores y presentado ante el juzgado.

Costos del Divorcio Express

El proceso judicial requiere la representación de un procurador y la asistencia de un abogado. Los costos pueden oscilar entre 400 y 1.000 euros para los honorarios del abogado y entre 120 y 200 euros para el procurador. Además, se necesita un poder notarial, cuyo costo varía entre 40 y 60 euros, aunque puede evitarse mediante el apoderamiento “apud-acta”.

Divorcio ante Notario

La Ley de Jurisdicción Voluntaria de 2015 permite realizar un divorcio mediante escritura pública ante un notario, siempre que la pareja no tenga hijos menores de edad o incapacitados. Este procedimiento también requiere la asistencia de un abogado y los costos notariales rondan entre 150 y 200 euros. Si existen hijos mayores de edad, deben comparecer y firmar junto a sus padres ante el notario.

Factores que Afectan los Costos

Los honorarios de los abogados dependen de factores como la redacción del convenio regulador, reparto de bienes y posibles pensiones compensatorias. Estos costos pueden negociarse, ajustándose a la complejidad de cada caso específico.


Imagen: infobae

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