La NASA ha sorprendido al mundo con el hallazgo de una roca en Marte, conocida como Cheyava Falls, que podría contener indicios de vida microbiana. Este descubrimiento se realizó en el cráter Jezero, donde el rover Perseverance ha encontrado evidencia de agua, materia orgánica y reacciones químicas que podrían haber sustentado vida en el pasado. Laurie Leshin, directora del laboratorio de Propulsión a Reacción de la NASA, destacó la importancia de este hallazgo, aunque también pidió cautela en las interpretaciones.
El anuncio ha generado un gran revuelo en los medios de comunicación y en las redes sociales, aunque algunos han cuestionado el momento en que se hizo público, coincidiendo con discusiones sobre el presupuesto de la NASA. Sin embargo, la propia NASA ha subrayado que se necesitan más investigaciones para confirmar la relevancia de esta roca.
Cheyava Falls no es la primera roca prometedora encontrada en Marte. El rover Curiosity ha detectado moléculas orgánicas en el cráter Gale, pero lo que hace especial a Cheyava Falls es la combinación de tres elementos: material orgánico, evidencia de reacciones químicas antiguas y exposición al agua líquida. Alberto Fairén, del Centro de Astrobiología, explica que esta combinación la convierte en un objeto de estudio astrobiológico muy atractivo.
Sin embargo, existen otras hipótesis que podrían explicar las características de la roca, como procesos abióticos. La posibilidad de que el metano detectado en Marte provenga de alteraciones minerales también se considera. A pesar de las incertidumbres, los científicos coinciden en que es fundamental traer las muestras a la Tierra para un análisis más detallado.
La misión de retorno de muestras, conocida como Mars Sample Return, está en evaluación debido a problemas de presupuesto. Aunque algunos han sugerido que el anuncio de Cheyava Falls podría estar relacionado con esta situación, los expertos aseguran que el descubrimiento es un avance significativo en la búsqueda de vida en Marte.
Imagen: nasa