Las compras online se han vuelto comunes, incluso entre personas mayores. Son rápidas y cómodas, pero es crucial conocer tus derechos, como el derecho de desistimiento. Este derecho te permite cancelar un contrato sin justificación ni penalización, dentro de un plazo específico.
El derecho de desistimiento está regulado por la normativa europea y española. La Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios establece que puedes desistir del contrato en los supuestos previstos legalmente.
El plazo mínimo para ejercer este derecho es de 14 días naturales desde la recepción del producto o la celebración del contrato. Si la empresa no informa adecuadamente sobre este derecho, el plazo se extiende a 12 meses adicionales.
Para ejercer tu derecho, debes notificar a la empresa tu decisión. Puedes hacerlo por email, burofax o mediante un formulario de desistimiento. La notificación debe incluir detalles del contrato y del consumidor, y la fecha de la notificación.
Existen excepciones al derecho de desistimiento, como bienes personalizados, perecederos, precintados por razones de higiene, grabaciones y software desprecintados, servicios completamente ejecutados, y servicios de alojamiento y transporte con fechas específicas.
Una vez ejercido el derecho, debes devolver los productos en su estado original. La empresa debe informarte sobre la dirección de devolución y quién asume el coste del envío. El reembolso debe realizarse en un máximo de 14 días desde la notificación, incluyendo el coste de entrega inicial.
Para evitar complicaciones, lee la política de devoluciones antes de comprar y conserva todos los documentos relacionados con tu compra. Si decides desistir, hazlo lo antes posible para cumplir con los plazos y obtener el reembolso correspondiente.
Imagen: Business Insider