El Gobierno de Estados Unidos y 30 estados han presentado una demanda antimonopolio contra Live Nation, la empresa matriz de Ticketmaster. La demanda alega que Live Nation ha abusado de su dominio en la industria de venta de entradas y eventos en vivo, perjudicando a los aficionados y limitando la competencia. Los reguladores buscan la disolución de la empresa, lo que podría transformar radicalmente el mercado de eventos en vivo.
La demanda surge tras el caos en la venta de entradas para la gira “The Eras Tour” de Taylor Swift, que evidenció la falta de competencia y los altos costos para los consumidores. Live Nation controla aproximadamente el 80% de las entradas para conciertos en las principales salas de conciertos de Estados Unidos, lo que ha llevado a precios elevados y un mal servicio al cliente.
El Departamento de Justicia y los fiscales generales argumentan que Live Nation ha utilizado prácticas anticompetitivas para mantener su monopolio, afectando negativamente a los fanáticos, artistas y promotores más pequeños. La empresa, por su parte, niega las acusaciones y afirma que su margen de beneficio es bajo en comparación con otras empresas tecnológicas.
La demanda ha sido bien recibida por los competidores de Ticketmaster y defensores antimonopolio, quienes esperan que esto impulse la competencia y mejore la experiencia de los consumidores. La acción legal también refleja un esfuerzo más amplio de la administración de Biden para reforzar la aplicación de las leyes antimonopolio en diversos sectores de la economía.
Imagen: CNN