¿Tu móvil se ha vuelto lento? No te preocupes, tengo algunos trucos para acelerarlo, pero también te contaré cómo evitar que esto suceda desde el primer día. Prevenir es mejor que curar, así que es importante tener buenas prácticas desde el principio.
Instala solo lo necesario
Evita instalar una gran cantidad de aplicaciones, especialmente en teléfonos Android. Incluso las aplicaciones que no estás usando pueden afectar el rendimiento de tu teléfono. Además, deshazte del bloatware preinstalado que ocupa espacio en la memoria RAM y consume recursos.
Desactiva la extensión de RAM
Aunque activar la extensión de RAM puede parecer una buena idea, en realidad puede generar un desgaste extra en el dispositivo a largo plazo. Además, utiliza parte de la memoria física de almacenamiento, lo que puede ocasionar problemas. No necesitas más RAM de la que tu teléfono tiene.
Libera espacio en tu memoria interna
Mantén un control meticuloso del espacio disponible en tu teléfono. Evita que se llene por encima del 75% para garantizar un mejor rendimiento. Elimina archivos multimedia duplicados, vídeos de WhatsApp y otros archivos que no necesitas. Mantén tu almacenamiento desahogado para un mejor funcionamiento.
No actualices si no es necesario
Si bien las actualizaciones son importantes para la seguridad, en algunos casos pueden afectar el rendimiento. No actualices a nuevas versiones de sistema operativo inmediatamente después de su lanzamiento. Las primeras versiones suelen tener problemas y es mejor esperar a que se solucionen. Investiga en foros y comunidades para conocer la opinión de otros usuarios antes de actualizar.
Sigue estos consejos desde el primer día para evitar que tu móvil se vuelva lento. Instala solo lo necesario, desactiva la extensión de RAM, libera espacio en tu memoria interna y sé cauteloso al actualizar. Mantén tu teléfono funcionando de manera óptima y disfruta de un rendimiento rápido y eficiente.
Imagen: Xataka